¿Te ha pasado que haces cambios en tu alimentación, incluyes más fibra,
probióticos, otros suplementos... y aún así no ves resultados?
La hinchazón sigue. El tránsito va lento. El cansancio no se va.
Si sientes que algo no cuadra,
tienes razón
.
Durante años nos enfocamos solo en
qué bacterias tienes
en el
intestino.
Pero eso ya no es suficiente. Lo que lo cambia todo, es entender
qué
están haciendo esas bacterias
.
Porque sí, puedes tener una microbiota "rica", pero si los genes de esas
bacterias están apagados,
no producen nada útil para ti
.
No generan los compuestos antiinflamatorios, no sintetizan neurotransmisores,
no te protegen como deberían. Están ahí, pero en modo silencioso.
¿Y qué determina si esos genes se activan o no?
Pero también
el entorno dentro de tu intestino
: el pH, la
presencia de otros nutrientes, incluso el tipo de fibra, la cantidad y en qué
momento la consumes… entre otros factores.
La buena noticia es que no necesitas obsesionarte ni seguir una alimentación
perfectamente medida al dedillo.
Y aquí es donde muchas personas se frustran: saben lo que
deberían
comer, pero no cómo hacerlo en su día a día, con platos reales y saludables,
ricos y equilibrados.
Por eso diseñé el
Vademécum Nutritivo
: una plataforma viva con
recetas saludables, que va creciendo con el tiempo.
Si quieres cuidarte sin complicarte día tras día:
PD 1: En la siguiente newsletter te voy a contar algo que te va a gustar mucho
mucho 🥰
Obligué a mi pareja a hacer algo para vosotras (jajaja) y que te va a dar mucha
luz en tu salud digestiva.
Ya te contaré, ya te contaré.
PD 3: Si quieres que te ayude en tu alimentación, con un plan personalizado
para ti, podemos empezar a trabajar juntas.
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